¿Alguna vez has estado de viaje y has olvidado llevar tu champú en seco preferido? Tampoco tienes champú líquido a mano para usarlo, pero necesitas lavar tu cabello y que se vea limpio y brillante. ¿No sabes qué hacer? No te preocupes, aquí te presentamos algunas alternativas de métodos caseros para reemplazar el shampoo en seco.
¿Qué es el champú en seco?
El Champú en seco es un producto que ayudan a darle volumen y brillo al cabello. Está compuesto por varios ingredientes como polvos absorbentes, aceites, polímeros y edulcorantes. La principal ventaja de este producto es que se aplica directamente al cabello y no necesita la instalación de agua para obtener los resultados deseados. Este producto reemplaza la necesidad del uso de un champú tradicional y no deja residuos.
Método 1: Bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es otra alternativa para reemplazar tu champú en seco, es un ingrediente común en cada hogar y puede ofrecer muchos beneficios para tu cabello. Esta sustancia es muy conocida por ser usada para liberar dolor en las piernas por cansancio a causa del ejercicio. Una mezcla de bicarbonato de sodio, agua y unas gotas de tu aceite de cabello preferido pueden ayudar a limpiar y refrescar tu cabello.
Para preparar una solución de bicarbonato de sodio tendrás que mezclar dos cucharadas de bicarbonato con un litro de agua, después agregar tres cucharadas de tu aceite para el cabello para aumentar el poder de control de la grasa. Aplica la mezcla directamente al cabello, frota con los dedos con cuidado y deja actuar por unos minutos antes de enjuagar. La mezcla de bicarbonato no produce espuma, así que no te preocupes si no notas fácilmente su empleo.
Método 2: Café
Tanto el café instantáneo como el café molido son buenas soluciones para remplazar el champú en seco. Estos ayudan a eliminar el exceso de grasa, aportando volumen y eliminando los restos de dañinos productos químicos. Ingiere un vaso de agua caliente y viertelo en el recipiente con el café. El proceso de remojo debe ser de unos 15 minutos lo suficiente para absorción de aceites.
Después de ese tiempo, ve separando mechas de cabello y empieza a aplicar el líquido de café desde la raíz hasta las puntas. Una vez aplicado, deja actuar por unos cinco minutos y después empieza a enjuaguar el líquido de desde la raíz hacia las puntas. A final cuando hayas enjuagado completamente el cabello, enjuague con agua sucia para cerrar las escamas. Es importante que repites el proceso cada 2 o 3 semanas.
Método 3: Avena
La avena es una de las mejores alternativas para reemplazar el champú en seco, ofreciéndonos muchos beneficios que mantienen sano el cabello. Es un cereal rico en gluten made perfecto para mejorar el brillo, esponjosidad y volumen del cabello. La avena además contiene muchas vitaminas y minerales entre los que destacan los aportes de hierro, zinc, cobre, ácido fólico y vitaminas B.
Para preparar la mask de avena necesitaremos media toma de avena y un cuarto de litro de agua tibia. Deja reposar una porción de avena en un cuarto de litro de agua tibia durante media hora para ablandar la avena. Después de esa hora tendrás una mezcla consistente de avena. Después, suavemente, con los dedos, masajea la mezcla en tu cabello y la zona de tu cuello, deja actuar durante cinco minutos y enjuague tus cabellos con agua fría. Un baño de sol tras el enjuague también ayudará a nutrir el cabello.
Método 4: Limón y sal
El limón es excelente para limpiar y dar brillo natural al cabello, ya que contiene vitamina C y alfa hidroxi ácidos. La sal también ayuda a eliminar la grasa del cuero cabelludo. Esta método fue usado durante mucho tiempo por muchas familias para lavar el cabello y mantener cierto control de la transpiración del cuero cabelludo. Mezcla medio limón exprimido con un cucharada de sal y un vaso de agua. Aplica la solución al cabello mojado, masajea con los dedos, enjuaga con abundante agua y dese un poco de brillo masajea tu cabello con jugo de limón. Después dejo que el sol se< encargue de secar tu cabello.
Método 5: Aceites
Los aceites son útiles para darle volumen y brillo a tu cabello, además de tener propiedades antisépticas que ayudan a prevenir enfermedades del cuero cabelludo. Los aceites más comunes que se usan para los cabellos son el aceite de oliva, aceite de coco, aceite de ricino, aceite de almendras y aceite de argán. Debes aplicar unas gotas al cuero cabelludo y a las raíces de tu cabello, luego con los dedos da suaves masajes circulares. Puedes aplicar dos tipos de aceites mezclado para mejorar la hidratación y prevenir la resequedad del cabello.
Método 6: Vinagre blanco
El vinagre blanco es uno de los métodos más antiguos usados para limpiar el cabello. Tiene propiedades purificantes, elimina la grasa, el polvo y los residuos de los productos químicos nocivos. Mezcla media taza de vinagre blanco, un litro de agua y unas gotas de aceite para cabello. Esta mezcla debe ser usada sólo para el enjuague final, presta atención porque no debes aplicar el vinagre al cabello directamente. Usa esta mezcla después de un lavado normal para enjuague finales.
¿Cuáles son los cuidados post-lavado que debes tener?
No todos los cabellos reaccionan igual ante los tratamientos caseros de limpieza, pero siempre es importante el cuidado luego de un baño. Se